Puentes

Puentes

Un puente dental es usado para cubrir una separación que exista entre dientes sanos o un diente faltante. La función del puente es fijarse entre dos dientes sanos usando la corona como pieza central para tomar el lugar de la pieza faltante o estéticamente inadecuada. Existen puentes fijos que son aquellos que cumplen con la misma función que los removibles, sin embargo como lo dice su nombre estos no pueden retirarse.

Los puentes reducen el riesgo de generar daño en la encía, ayudan a corregir problemas de mordida e inclusive problemas del habla. Las personas que se realizan este tratamiento deben estar conscientes del compromiso de higiene dental que implica, sin embargo si se tiene la higiene adecuada, un puente puede llegar a durar hasta 10 años.